
RESUMEN
En un país donde existe un creciente interés por innovar, transformar y reformar los procesos que afectan nuestra estructura social, la educación hace parte activa del debate y se encuentra en el centro de una discusión que busca definir la dirección correcta hacia la que debemos orientar los lineamientos y las políticas que determinarán su enfoque durante los próximos años.
Sin embargo, todos los esfuerzos por modernizar los parámetros y estándares siguen un patrón que desafortunadamente, no involucra activamente la Educación Artística en el programa académico, o por lo menos, no con la misma intensidad e importancia que las demás áreas de estudio. Y esto, aunque se intensifiquen los esfuerzos por adaptar las políticas educativas a las necesidades de un país moderno, no es más que repetir un modelo planteado hace más de doscientos años y que actualmente ya no resulta útil seguir aplicando.
En este panorama, las artes representan un recurso fundamental para propiciar espacios de aprendizaje valiosos, que permitan al estudiante un desarrollo cognitivo integral, interactuando con las diferentes formas de conocimiento y articulando su proyecto de vida en torno a sus capacidades, talentos y pasiones.

David Alfonso Duarte C
Estudiante de Licenciatura en Educación de Artes Plásticas de la Universidad de Antioquia.
En 2013 participó del Congreso Mundial de Cultura que organiza la Universidad Federal de Bahia, en Brasil.